Buffff!! Pero que buena es esta colección, Dios mío!!!!!!.....Si no la conoceis, por favor, ya estais corriendo a comprar los 8 tomos que han salido hasta la fecha; la verdad es que pocas veces existe tal desproporción entre calidad y precio: creedme, por tan solo 7,5 € que cuesta cada tomo - que tienen unas 140 páginas - no creo que encontreis en el mercado algo que tan condenadamente bueno.
Robert Kirkman nos ofrece un perfecto y complejo retrato del ser humano, con sus grandezas y sobre todo con su miseras, pues en este comic, aunque es un tebeo de "zombies", los verdaderos protagonistas no son los muertos vivientes, sino el hombre, a quien realmente hay que tenerle miedo, sobre todo si está expuesto a una situación límite, pues es capaz de lo peor, de las mayores atrocidades, de la envidia, del engaño, la traición, la mentira....Solo cuenta una cosa, seguir vivo y proteger a los que realmente quieres, a cualquier precio y a costa de quien sea.
En este tomo, Kirkman conduce la trama nuevamente de manera magnífica, teniendote en un vilo y sintiendote en la piel de los protagonistas, haciendote temer por aquello que les acecha, desembocando en un final brutal y descarnado, pero a la vez, abriendo paso a nuevas incógnitas e incertidumbres sobre lo que pueda pasar en el futuro, pues queda en el aire el destino de varios personajes. Como ya nos temíamos con el inconmensurable cliffhanger del anterior tomo, en este hay muchas muertes - algunas de gran impacto, por lo menos para mi, otras no tanto, pues ya presumíamos que eran "carne de cañón" - aunque no "se lía todo lo parda" que a priori parecía, pero además también hay deserciones inesperadas y decisiones equivocadas, que conducen a un fatal desenlace. La batalla, que se presumía colosal y épica, no lo es tanto, y creo que eso es un acierto de guión, pues se acerca más a lo que sería la realidad, pues no estamos hablando de soldados o gente profesional, sino que en su mayoría se trata de gente normal y corriente, abocados o dirigidos a ese trágico trance, pues ¿quien de nosotros sabría manejar armamento militar más o menos sofisticado?. El flashback al comienzo del comic, contándonos lo ocurrido con el gobernador, cuando todo el mundo espera una espectacular batalla, creo que es todo un acierto, pues nos muestra la capacidad que tiene este deleznable personaje de dirigir, adoctrinar y manipular a todos los que están a su cargo.
Por otra parte, y aunque al principio, el dibujo de Charlie Adlard, aderazado con los grises de Cliff Rathburn, no terminaba de convencerme, ahora mismo, me parece perfecto, es más, no entendería esta serie sin sus dibujos....¿Quien se acuerda de Tony Moore?
En definitiva un nuevo y perfecto ejemplo de como hacer un buen comic. Siempre te deja con ganas de más, pero tarda tanto en llegar un nuevo ejemplar a tus manos que la espera se hace eterna y angustiosa, casi como la peripecia vital de sus personajes.
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